El comercio electrónico y las compras on line, se han consolidado en España, y una prueba consistente de ello son los 7.760 millones de euros movilizados en el 2009, por parte de los usuarios de Internet en compras realizadas, según ONTSI ( Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información ). Esto, obviamente, dispara la competencia entre las empresas en obtener la mayor parte de la torta, y esto profundiza el estudio de los factores que provocan que el usuario compre, o dicho de otra manera, sacar los obstáculos que inciden en abortar una compra on-line.
Relacionado con esto, un estudio realizado por la firma Compuware Corporation en Alemania, luego de encuestar a 1.000 consumidores, ha llegado a la conclusión de que si un portal de comercio electrónico tarda demasiado en cargarse o no funciona correctamente, el consumidor no le da más de dos oportunidades antes de abandonarlo definitivamente.
En efecto, una mala experiencia del cliente con el tiempo de carga de la web de una tienda online repercute negativamente en el comerciante. Un alto porcentaje de los consumidores consultados (53,5%) admite no tener intención de volver a comprar en las webs de comercio electrónico demasiado lentas. Uno de cada tres se siente frustrado cuando el tiempo de carga de una web de e-commerce es demasiado elevado, y el 16,8% dice sentirse decepcionado con la empresa cuando esto sucede.
Esto adiciona un factor, que si bien era considerado cuando se estructuraba una tienda on-line, el afán de brindar muchos servicios y funciones integradas en una página web, vuelve a la página lenta y con un tiempo de carga grande, lo que ahora se sabe es contraproducente a la hora de definir una venta electrónica. Si bien, en la misma encuesta un 10,5% de los encuestados da importancia al número de funciones integradas en una página web de e-commerce, es un porcentaje muy inferior a los consumidores que les resulta negativo las consecuencias que acarrean las mismas.
Esto no quiere decir que la tienda no contenga programas y aplicaciones que mejoren la funcionalidad y operativa de la tienda electrónica, pero prende una luz amarilla en el tema de sobrecargar el trabajo del servidor. Es decir, de los consejos que se indicaban para lograr un buen resultado en el comercio electrónico, siguen vigente la utilización de imágenes con función zoom o amplicación, con detalles del producto, el ofrecer varias opciones de pago y sacar provecho de las redes sociales, aunque de alguna manera signifiquen utilización de recursos.