Luego de una larga serie de procesos, tanto tecnológicos como sociales, Google anuncia que comienza a vender sus lentes inteligentes GLASS en los Estados Unidos al público en general. El hecho se puede considerar histórico y marcar un antes y un después, teniendo en cuenta las prestaciones y funcionalidades que permite el producto.
Luego de un período de prueba, que funcionó a partir de invitaciones de Google, el gigante de las búsquedas puso a la venta al público en general en Estados Unidos a un precio de U$S 1,5 mil más impuestos.
Pero lo interesante es conocer qué nos ofrece este producto de Google, llamado GLASS, en el cual se ha invertido mucho dinero en su desarrollo y se tienen cifradas muchas esperanzas de éxito.
Como introducción diremos que GLASS fué pensado como un dispositivo para permitir a los usuarios de teléfonos inteligentes ver información sin tener que utilizar las manos; permitiendo el acceso a Internet a través de la la tecnología WiFi, mediante órdenes a través de la voz.
Pero entrando en el detalle del hardware y las posibilidades prácticas que ofrece GLASS, se debe mencionar: cámara digital que permite tomas fotos con una resolución de 5 Megapíxeles y grabar vídeos con 720p de definición; touchpad instalados en la superficie de GLASS que permite controlar las funciones del dispositivo mediantes pestañeo, toques y desplazamientos.
Siguiendo con el hardware, es fundamental como soporte para el funcionamiento escencial de GLASS, que es el destinado a realizar las comunicaciones, enviando y recibiendo archivos: WiFi 802.11 b/g y Bluetooth.
Uno de los componentes más atractivos y que nos hará ver gente hablando sola en la calle es el micrófono incorporado que funciona de interface para dar órdenes al dispositivo a través de acciones voz. Por ejemplo, para activar el dispositivo, el usuario inclina la cabeza hacia arriba y dice “Ok, Glass”.
Si queremos tomar una foto de lo que estamos viendo en la pantalla del disposito, simplemente decimos: Ok Glass, take a picture. Queremos grabar un vídeo, decimos: Ok Glass, Record a Vídeo. Todo esto sin mover un dedo.
Pero hay muchas otras utilidades, al tener GLASS cargados software como Google Maps, Google + y Google Search. Por ejemplo, si decimos: Ok Glass, Get directions to home y nos mostrará la mejor ruta para volver a nuestro origen. También podemos de la misma forma enviar mensajes por Gmail, realizar llamadas a nuestros contactos, etc.
En materia de estética, Google no dejó nada librado al azar en el desarrollo del dispositivo GLASS y para esto se asoció con Ray-Ban, una marca líder en modelos de lentes, para colocar al mismo en monturas para todos los estilos. De esta manera Google anexa la posibilidad de unir la tecnología con la estética, evitando que el dispositivo pierda atracción.
Por otro lado Google amplió el mercado potencial para su producto al permitir que usuarios que utilizan lentes por prescripción médica, puedan adaptar los cristales que necesitan al dispositivo de GLASS de forma que su necesidad óptica no sea una barrera para poder anexar el dispositivo de realidad aumentada.
La pantalla electrónica del tamaño de una estampilla, que permite al usuario estar filmando sin ser detectado y realizar otras tareas, como compartir fotos y vídeos y enviar correos electrónicos , ha generado ya polémica a niveles de integrantes de varios gobiernos en lo que se relaciona con la privacidad, aunque el presidente de la compañia, Eric Schmidt, le ha quitado importancia, argumentando al respecto con una respuesta ética que supone que sólo al que tenga algo que ocultar le puede molestar ser filmado.
Sin dudas que estamos en presencia de un nuevo dispositivo, que nos recuerda imágenes cinematrográficas de ciencia ficción, pero que llega para instalarse en nuestra vida real y cotidiana. Habrá que seguir la evolución del mismo para comprobar que las previsiones éxito de Google eran correctas.
